Entre los días 18 y 20 de Noviembre han realizado escala de descanso en el puerto de Málaga los buques de la Armada Española Blas de Lezo F-103 y Galicia L-51. Durante el tiempo que han permanecido en los muelles de dicho puerto han podido ser visitados por los ciudadanos. Estas dos unidades, junto con otras, están participando en el ejercicio anfibio combinado «GRUFLEX 61» cuyo objetivo es el adiestramiento en planeamiento y ejecución de operaciones anfibias y proyección del poder naval. Este ejercicio se está llevando a cabo en aguas de Cadíz, Mar de Alborán y Baleares desde el 14 hasta el 25 de Noviembre.
La fragata Blas de Lezo F-103 llegaba en la mañana del viernes 18 y con la ayuda de dos remolcadores quedaba atracada en el muelle número 2. Construido en los astilleros ferrolanos de Izar (actualmente Navantia) es el tercer buque de la clase «Álvaro de Bazán» que entró en servicio. Pertenece a la 31ª Escuadrilla de Escoltas y tiene su base en el Arsenal Militar de El Ferrol, al igual que las otras cuatro fragatas que componen esta clase.
Cuenta con una eslora de 147 metros, una manga de 18,50 metros y desplaza 6.000 toneladas a plena carga. Está propulsada por dos turbinas de gas LM-2.500 para altas velocidades y por dos motores diésel Bazán Bravo-12 para navegar por debajo de los 18 nudos de velocidad. La dotación la componen 201 personas y habitualmente transporta un helicóptero Sikorsky SH-60B «Seahawk». Su armamento está compuesto por varios tipos de misiles, torpedos, ametralladoras y un cañón. También dispone de los más modernos sistemas de navegación, radares y sensores. Principalmente actúa como buque de escolta oceánico y como buque de mando y control en un escenario de conflicto. Es capaz de operar integrado en una flota aliada y de proporcionar cobertura a fuerzas expedicionarias.
El buque Galicia L-51 entró al puerto malagueño unas horas más tarde que la fragata y quedó atracado en el muelle adosado al dique de levante. Es un buque de asalto anfibio tipo LPD (Landing Plataform Docks) que da nombre a su clase. Su construcción forma parte del proyecto conjunto entre los astilleros españoles Izar (actualmente Navantia) y de los Países Bajos. El resultado fue la fabricación de los buques Rotterdam L-800 y Galicia L-51. El español entró en servicio en 1998 y está habitualmente atracado en la Base Naval de Rota (Cádiz).
Está diseñado para transportar tropas y vehículos, normalmente Infantería de Marina del Tercio de la Armada de San Fernando (Cádiz). Los vehículos son llevados hasta él mediante lanchas de desembarco LCM´s, pertenecientes al Grupo Naval de Playa, que los cargan y los transportan hasta el garage de 1.010 m2 a través del dique inundable situado en popa. En su interior puede transportar 33 carros de combate o 170 vehículos blindados y 4 lanchas de desembarco pesadas LCM-1E. También tiene capacidad para transportar 4 helicópteros pesados SH-3D o 6 helicópteros medios AB-212. La dotación la componen 185 tripulantes y puede alojar a 600 soldados y 12 miembros del contingente aéreo.
Aunque su misión principal es la de llevar a cabo operaciones anfibias, también realiza operaciones de mantenimiento de la paz y de ayuda humanitaria, mediante apoyo médico y quirúrgico, en catástrofes naturales, ya que cuenta con un hospital a bordo de grandes dimensiones.
Tiene una eslora de 160 metros, una manga de 25 metros y desplaza 13.815 toneladas a plena carga. Está propulsado por cuatro motores diésel Bazán Bravo-Caterpillar de aproximadamente 22.000 CV de potencia que trabajan para dos hélices de paso variable de 5 palas cada una. En proa dispone de una hélice de empuje transversal de unos 1.800 CV de potencia. Para su defensa está equipado con 2 ametralladoras Oerlikon 20mm (puede montar hasta cuatro) y 6 lanzadores de señuelos Mark 36 SRBOCK contra misiles anti-buques.