Hace pocos días, estuvo atracado en el muelle uno del puerto de Málaga el yate Grand Rusalina (IMO 1007354). Llegó procedente de Gibraltar, donde habitualmente realizan escala estos barcos para hacer combustible, y pasó varios días atracado en el puerto malagueño. Después, zarpó con destino Cartagena y desde allí navegó hasta la Costa Azul, donde se encuentra actualmente.
Este yate de 59,74 metros de eslora y 966 toneladas de arqueo bruto, es una construcción del astillero que Trinity Yachts tiene en Nueva Orleans (Estados Unidos). En el año 2003 comenzó a navegar con el nombre de Ulysses para la persona que realizó el encargo de su construcción al astillero. El diseño exterior corrió a cargo del equipo de Trinity Yachts y del interior se ocupó la firma Ricky Smith Desing. En 2014 es reformado, vendido a su actual propietario y rebautizado Grand Rusalina.
El casco está fabricado en acero. Para la superestructura se utilizó el aluminio y en las cubiertas predomina la teca. Dispone de un sistema de estabilización de última generación que consigue una navegación más suave y cómoda. De la propulsión se ocupan dos motores diésel Caterpillar 3512B con 1.800 caballos de potencia. El Grand Rusalina es capaz de alcanzar una velocidad máxima de 14 nudos y navegar plácidamente a 12,5 nudos. En sus depósitos puede almacenar 176.000 litros de combustible, que le dan una autonomía de 6.000 millas náuticas a 13 nudos, y 31.800 litros de agua potable. Tiene capacidad para 16 invitados, alojados en 8 cabinas, y 9 miembros de la tripulación.
