El buque Rainbow Warrior, propiedad de la organización ecologista Greenpeace, atracó en el muelle número dos del puerto de Málaga el 27 de Octubre. Llegó a las 09:45 horas tras haber realizado una campaña de dos meses por el Mediterráneo a favor del uso de las energías renovables. A lo largo de dicha campaña visitó puertos de Líbano, Turquía e Italia. Durante su escala en Málaga, primera que realiza en este puerto y que duró unas pocas horas, se procedió al relevo de algunos tripulantes y al aprovisionamiento. La escala en Málaga no ha sido fruto de la casualidad. Hace un mes se aprobó por unanimidad en un pleno municipal reducir a la mitad las emisiones generadas por la movilidad urbana en 2030, a raíz de un compromiso adquirido con Greenpeace. De esta manera Málaga se ha unido a otras once ciudades españolas, entre las que se encuentran las más grandes, en su compromiso por avanzar hacia una movilidad más sostenible.
El buque de Greenpeace pudo ser visitado desde las 15:00 hasta las 19:00 horas por el público en general. Con esta medida la organización ha querido dar a conocer el lugar donde trabajan los voluntarios y las labores que desempeñan por todo el mundo. El Rainbow Warrior, buque insignia de Greenpeace, tiene capacidad para alojar a 32 personas. La tripulación, compuesta por 15 personas, está embarcada durante tres meses antes de ser relevada para descansar. El resto de las personas a bordo son voluntarios que embarcan por el periodo que dura cada campaña.
Los medios de información pudieron acceder al buque a las 14:00 horas. Durante la rueda de prensa, organizada en la popa al amparo del pequeño hangar, tuvieron oportunidad de realizar las preguntas que consideraban oportunas a Pette Wilcox, capitán del Rainbow Warrior. Wilcox, que lleva en Greenpeace 30 años como capitán, ha vivido algunos momentos difíciles a lo largo de su pertenencia a la organización ecologista. Estuvo presente en el momento del hundimiento del primer Rainbow Warrior en Nueva Zelanda por los servicios secretos franceses en 1985 y más recientemente fue encarcelado por las autoridades rusas durante 3 meses, junto con otros compañeros, al protestar contra las prospecciones petrolíferas que ese país estaba realizando en el Ártico. Al ser preguntado sobre que países son los que se emplean más duramente contra ellos, no dudó en responder: Rusia y Brasil. También comentó medio en broma que su esposa le había prohibido viajar a Rusia.
El actual Rainbow Warrior es el tercer buque de Greenpeace que luce este nombre. El primero de ellos, un antiguo pesquero adquirido por la organización en 1978, fue hundido en Mururoa por los servicios secretos franceses en 1985. El segundo, una goleta con motor auxiliar fabricada en 1957, fue adquirida por Greenpeace en 1989. El 16 de Agosto de 2011 fue traspasado en Singapur a la ONG bangladeshí «Frindship» que lo rebautizó con el nombre de Rongdhonu (arcoíris en bengalí) y lo convirtió en un hospital flotante. En 2011 es botado el nuevo Rainbow Warrior, cuya construcción había comenzado en el año 2009 en el astillero alemán Fr. Fassmer GmbH & Co. KG. Es el primer buque construido para Greenpeace, ya que los anteriores habían tenido previamente otros propietarios. El coste de su fabricación, aproximadamente 40 millones de euros, fue sufragado gracias a las aportaciones de miles de personas de todo el mundo.
Tiene una eslora total de 57,92 metros, una manga de 11,30 metros, un calado de 5,15 metros y un arqueo bruto de 855 toneladas. El aluminio es el material principal utilizado en su construcción. Cuenta con dos mástiles en forma de A de unos 55 metros de altura y 5 velas que suman en total 1.288 m2. Estas velas fueron diseñadas por Guido Cavalazzi, también diseñó las del Copa América Prada Luna Rossa, y han sido fabricadas por North Sails en la localidad pontevedresa de Cuntis. Son velas de Dacron en doble capa con un corte clásico producidas de forma artesanal y realizadas para obtener una máxima durabilidad. Aunque habitualmente utiliza las velas para navegar, también cuenta con un motor diésel-eléctrico Caterpillar 3512C de 1.425 KW de potencia y autonomía para 35 días. Dispone de varias embarcaciones semirrígidas y modernos instrumentos para la navegación.
El Rainbow Warrior navegará con destino Casablanca, previa escala en Tánger, para estar presente en la Cumbre Mundial del Clima, COP 22, que tendrá lugar en Marrakech del 07 al 18 de Noviembre. En dicha cumbre se reunirán representantes de los gobiernos de todo el mundo para continuar con las negociaciones climáticas tras el acuerdo de París del año pasado. Un equipo de Greenpeace asistirá a esta cumbre para que los países asuman compromisos más ambiciosos para garantizar que las temperaturas globales no aumenten más de 1,5ºC.